Montevideo (Uruguay), 18 de octubre de 2013. El Programa Nacional de Discapacidad-Pronadis y el Instituto Nacional del Adulto Mayor-Inmayores del Ministerio de Desarrollo Social-MIDES presentaron el pasado día 16 el Plan de apoyo domiciliario a personas con discapacidad en situación de dependencia. El beneficio consiste en contar con una cantidad de horas de acompañamiento brindadas por un asistente personal calificado, para que el cuidador tenga la oportunidad de realizar tareas de cuidado de su propia salud tanto física como mental.
El objetivo de este programa es apoyar a las personas adultas mayores que tienen bajo su responsabilidad el cuidado de personas con discapacidad severa física y mental en situación de dependencia mediante acompañamiento por horas de un asistente personal. Los beneficiarios del programa son personas en situación de dependencia de entre 15 y 60 años, siempre que su cuidador o cuidadora principal sea una persona mayor de 65 años. El programa no incluye a personas que residan en hogares colectivos.
El programa comenzará a funcionar como plan piloto en tres departamentos del país, Montevideo, Paysandú y Cerro Largo, y luego se extenderá a todo el país como una acción más que avanza en la construcción de un sistema nacional de cuidados. Si bien se establecerán criterios de prioridad para la selección de los hogares, con este programa piloto se estarían cubriendo 3100 horas mensuales de apoyo. Se trata de una acción que no apunta a un impacto de cantidad, sino de calidad de vida de la población involucrada.
Doblemente vulnerables
El programa responde a una demanda creciente de solicitudes para apoyar a personas adultas mayores que no tienen redes de apoyo para compartir el cuidado de hijos o hijas con discapacidad severa y dependientes. Actualmente no existe una oferta accesible que colabore o comparta la responsabilidad del cuidado de estas personas, por lo que estos hogares se transforman en doblemente vulnerables: con personas adultas mayores y personas con discapacidades severas. Esta situación se ve agravada cuando estos hogares no tienen posibilidades de contratar servicios domésticos o de acompañamiento o no tienen familiares que puedan prestar apoyo en la tarea del cuidado.
La salud física y mental de los cuidadores de personas en situación de dependencia se ve afectada por las exigencias que conlleva el cuidado permanente. Cuando se trata de personas adultas mayores responsables de este cuidado, existen factores de riesgo tanto para el cuidador como para la persona cuidada debido al propio proceso evolutivo, con mayores riesgos por aislamiento y escasa contención de redes sociales y familiares.
El programa ha sido diseñado con el propósito de brindar apoyos puntuales para las personas en esta situación, considerando que impactará positivamente tanto en la persona que cuida como en la que recibe los cuidados. Así, a la persona cuidadora le aporta tiempo libre para dedicarse a actividades personales relacionadas tanto con el cuidado de su propia salud, como para actividades de esparcimiento y tiempo libre. En el caso de la persona dependiente le proporciona cierta autonomía con respecto a su cuidador familiar, dado que recibirá asistencia para permanecer períodos de tiempo sin la presencia constante de aquél, además de poder realizar actividades fuera del hogar, ya sea para cuidados de su salud o actividades de esparcimiento.
Nuevo paso hacia el Sistema Nacional de Cuidados
“Este programa apunta a brindar un respiro, una asistencia directamente en el domicilio a personas con dependencia severa y que son cuidadas por una persona adulta mayor”, apuntó Adriana Rovira, Directora del Instituto Nacional del Adulto Mayor-Inmayores, en el acto de presentación del programa, añadiendo que a veces esa es la única estrategia que encuentra la familia para el cuidado de la persona dependiente.
Por su parte María José Bagnato, Directora del Pronadis, destacó que “muchas veces separamos a las personas por su vulnerabilidad, pero cuando se dan dentro de una misma familia, estas vulnerabilidades se potencian”.
La Oficina Territorial del MIDES en cada departamento será el órgano referente para la población, si bien también el Pronadis o Inmayores proporcionarán información a aquellos que estén interesados en acceder a este servicio. Paralelamente a la implementación del programa se evaluará el impacto que tendrá este dispositivo en la familia, con el objetivo de hacer los ajustes necesarios.
El Ministro de Desarrollo Social, Daniel Olesker, consideró que “se ha avanzado mucho” en la construcción del sistema de cuidados a través de una serie de acciones de este tipo. Destacó a su vez la innovación que implica un programa que contempla a la misma vez al cuidador y a quien está siendo cuidado. En relación a la selección de los tres departamentos donde se iniciará la implementación del programa el ministro agregó que se realizó en base a criterios poblacionales, pero también en base a las demandas de más de 3000 personas que participaron en el debate sobre el Sistema Nacional de Cuidados.
La población que se beneficiaría con este programa en los 3 departamentos seleccionados (tomando en cuenta los datos del último censo y teniendo en cuenta solo discapacidad severa física y mental) serían aproximadamente 20.000 personas, las cuales serán evaluadas de acuerdo a un baremo de dependencia, una herramienta innovadora de medición que determinar, dentro de ese universo, los grados de dependencia severa de las personas con discapacidad y en base a eso determina quiénes podrán beneficiarse con el programa. En este sentido Rovira apuntó que se estima que un 6% de la población mayor en Uruguay tiene algún tipo de dependencia entre moderada y severa.
Actualmente el MIDES cuenta con 25 asistentes personales contratados que fueron reclutados mediante llamado público y ya están trabajando desde el 1º de octubre con algunas familias identificadas en el marco del plan piloto. Se trata de profesionales con experiencia y formación, a los cuales se les brindó además un curso de nivelación para llevar a cabo la tarea.
Fuente: MIDES