La Paz (Bolivia), 31 de Agosto de 2014. En Bolivia 7 de cada 10 adultos mayores todavía desarrollan algún tipo de trabajo remunerado, el 90% de ellos tiene obligaciones a diario que los mantiene ocupados y para cerca de la mitad de ellos, el 47%, son tantas sus actividades que no tienen el tiempo suficiente, según revela un estudio de HelpAge International. Algunos datos estadísticos de ese mismo estudio señalan que el 59% de la población mayor de 60 años vive con menos de un dólar al día y sólo el 22% de los mayores cuenta con una renta o pensión por jubilación.
En este sentido Rolando Villena, Defensor del Pueblo, insistió en la necesidad de construir una cultura de respeto y dignificación de las personas adultas mayores que garantice el ejercicio pleno de sus derechos y les permita, en esta etapa de su vida, recibir un trato digno, particularmente en sus hogares. Para Villena, el maltrato, el abandono, el despojo de bienes, además de los inconvenientes en los documentos de identificación, son los mayores problemas que enfrentan las personas adultas mayores en el país y que en muchos casos son ejercidas por sus propios familiares o allegados.
El 26 de agosto pasado se recordó el Día Nacional de la Persona Adulta Mayor, oportunidad en la que los representantes de distintas organizaciones defensoras de los derechos humanos hicieron un llamado a las autoridades y a la población para que asuman conciencia de que las personas mayores, que durante toda su vida han dado su aporte a la sociedad, reciban nuestro reconocimiento y retribución, garantizando el ejercicio efectivo de todos sus derechos.
En opinión Villena, las instituciones del Estado deben construir una cultura de respeto y dignificación de las personas adultas mayores, “a las que se les debe reconocer sus grandes valores, sabiduría y experiencia, pero sobre todo, se debe entender que son sujetos de todos los derechos que le reconoce la Constitución y las leyes”.
Una investigación especializada de la Defensoría del Pueblo detectó que otros problema que enfrenta este grupo poblacional es la soledad y la desconfianza en los demás; el abuso familiar y comunitario; la excesiva dependencia de terceros; la ausencia de una red social capaz de proporcionarle los medios de mejorar su autoestima y hacer valer sus derechos; las dificultades para acceder a los servicios de salud y jubilación existentes y para aprovechar los beneficios que se otorgan a las personas mayores (tales como rebajas, liberación de trámites, trato especial, etc.); la escasez de empleos adecuados para las personas adultas mayores,…
Si bien Bolivia logró avances importantes en cuanto a políticas de protección social en favor de los adultos mayores, como la denominada Renta Dignidad (Ley 3791), que ofrece una pensión vitalicia y universal a todas las personas mayores; el Seguro de Salud para el Adulto Mayor; y el beneficio de Derechos y Privilegios (Ley 1886), entre otros, muchas instituciones no reconocen esos derechos. La investigación señala que el 57% de las entidades bancarias no conoce la Ley 1886 de Derechos y Privilegios, y el 46% no cuenta con ventanillas únicas de atención para los adultos mayores. A esto se suma que más del 60% de las empresas de transporte también desconoce esta ley, por lo tanto no aplican los descuentos correspondientes.
Como dato significativo Bolivia es uno de los tres países con mayores desigualdades en la región, conjuntamente con Brasil y Perú.
Fuente: El Diario