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Bogotá (Colombia), 4 de julio de 2015. Los adultos mayores, a la hora de fijar la prioridad de políticas públicas, o se dejan a un lado, o se consideran un problema sin importancia.

Muchos segmentos de la población colombiana viven duros dramas en medio del desamparo estatal, la indiferencia y falta de solidaridad colectiva y, pese a ello, deben seguir con enormes dificultades haciendo su propio camino.

Es el caso de los mayores de 60 años, quienes conforman la población de adultos mayores. El 75% de ellos no tiene derecho a pensión, el 22% vive en condiciones de pobreza, con menos de 206.091 pesos mensuales (78 dólares), y cotidianamente deben buscar trabajo en labores informales. El número de personas que en el país tienen tal edad aumenta día a día, como que en 1985 eran el 7% de la población, hoy el 11% y se espera que dentro de 5 años, en 2020, sean el 13% de ella.

Un alto índice de esa franja de la población no tiene protección social, realidad que se suma, como se expresó, al que es un sector de alto crecimiento numérico, labora –fundamentalmente- en el sector informal y en considerable proporción vive en hogares pobres.

Muchos de ellos no tienen derecho a pensión, pese a haber laborado durante más de 30 años, porque si bien de los sueldos sus patronos les hacían descuentos para cotizar, éstos no hacían los pagos correspondientes por lo que no acumularon oficialmente el número de semanas necesarias para acceder a tal beneficio.

La Organización Internacional del Trabajo-OIT ha hecho sonar los timbres en vista de que los adultos mayores en gran número de países viven en condiciones precarias, la economía los ha hecho a un lado y se espera que a mediados del presente siglo serán dos mil millones de seres humanos quienes compongan tal franja, es decir, más del 20% del total de la población mundial. Y no se vislumbra que las cosas vayan a mejorar significativamente en cuanto a amparo, solidaridad y apertura de mercados hacia ellos.

Al respecto, el “Observatorio del mercado del trabajo y la seguridad social” de la Universidad Externado de Colombia, publicó un interesante trabajo sobre la participación de los adultos mayores en las economías de mercado. Sus datos y conclusiones son impactantes.

Los adultos mayores son un gran dolor de cabeza sin resolver que tiene Colombia y, a la hora de fijar la prioridad de políticas públicas, o se dejan a un lado, o se consideran un problema sin importancia.

Fuente: La Vanguardia

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