Costa Rica, junio de 2018. El pasado viernes 15 de junio fue el día designado por la Asamblea General de las Naciones Unidas, en su resolución 66/127, como Día Mundial de Toma de Conciencia de Abuso y Maltrato en contra de la Persona Adulta Mayor, día que las Naciones Unidas aprovecha para enviar un mensaje a todo el mundo, y que la Directora de ASCATE –organización afiliada a FIAPAM-, Ruth Rivera Víquez ha querido compartir con todos nosotros:
“Este día representa el día del año cuando todo el mundo expresa su oposición a los abusos y los sufrimientos infligidos a algunas de nuestras generaciones mayores. Si bien es un tema tabú, el maltrato a las Personas Adultas Mayores ha comenzado a ganar visibilidad en todo el mundo, a pesar de que sigue siendo uno de los tipos de violencia menos tratados en los estudios que se llevan a cabo a nivel nacional y menos abordados en los planes de acción.
El maltrato de las personas mayores es un problema social mundial que afecta la salud y los derechos humanos de millones de personas mayores en todo el mundo y es un problema que merece la atención de la comunidad internacional.
Este año la campaña se centra en la importancia de prevenir la explotación financiera de la que las personas mayores son víctima y garantizar los derechos humanos de nuestros mayores. En consonancia con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y el Plan de Acción Internacional de Madrid sobre el Envejecimiento, las personas mayores tienen derecho a una vida digna, libre de toda forma de abusos, entre otros, la explotación financiera y material, que podría conducir a la pobreza, el hambre y la falta de vivienda, poner en peligro su salud y bienestar, e incluso a una muerte prematura.
Las Naciones Unidas ha sido muy clara en decir en su mensaje de este año, que el maltrato es un problema social mundial que afecta la salud y los derechos humanos.
Unido a este mensaje y siendo que el objeto de la Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores es promover, proteger y asegurar el reconocimiento y el pleno goce y ejercicio, en condiciones de igualdad, de todos los derechos humanos y libertades fundamentales de la persona mayor, a fin de contribuir a su plena inclusión, integración y participación en la sociedad, donde las personas mayores tienen derecho al disfrute del más alto nivel posible de salud, sin discriminación y con pleno respeto a su dignidad y autonomía y que deberán tener acceso también a servicios de atención de salud que les ayude a mantener o recuperar un nivel óptimo de bienestar físico, mental y emocional, así como a prevenir o retrasar la aparición de enfermedades, con especial atención a las personas mayores dependientes por causa de enfermedades degenerativas como el Alzheimer.
También la Convención Interamericana hace un llamado a que desde el Estado y la sociedad se promueva el desarrollo de servicios sociosanitarios integrados especializados para atender las personas mayores con enfermedades que generan dependencia, incluidas las enfermedades crónico-degenerativas, las demencias y la enfermedad de Alzheimer (Art. 19, Derecho a la salud, inciso h. Ley 9394).
Así como a adoptar medidas adecuadas, cuando corresponda, para que la persona mayor que se encuentre recibiendo cuidados a largo plazo cuente con servicios y cuidados paliativos que abarquen al paciente, su entorno y su familia (Art. 12. Derecho a cuidados a largo plazo, inciso e. Ley 9394).
Y en momentos en que escuchamos, que cada tres segundos se diagnóstica una persona con Alzheimer, que la prevalencia del Síndrome demencial aumenta y peor aún, que no estamos preparados para cuidar una persona con Alzheimer, o con alguna dependencia, y más preocupante que no se cuenta con los recursos suficientes, humanos y/o económicos. Donde se requiere de medicamentos, pañales y cubrir otras necesidades.
Más preocupante es que según estimaciones, en Costa Rica hay entre 35.000 y 50.000 costarricenses que sufren un tipo de demencia (según datos de 2017). Razones más que suficientes para que ASCATE, organización afiliada a FIAPAM, uniendo esfuerzos con la Municipalidad de Cartago, haga realidad la implementación de una Unidad Gerontológica de Atención a Personas con deterioro cognitivo, como el Alzheimer y otras demencias.”
Desde el Secretariado General de FIAPAM damos la enhorabuena a nuestros compañeros de ASCATE, a través de su directora Doña Ruth Rivera, por la creación de esta Unidad Gerontólogica y los animamos a que sigan trabajando y alcanzando los objetivos que se propongan en beneficio de las personas adultas mayores.
En el siguiente enlace, se puede ampliar información sobre la Unidad Gerontológica de Atención a Personas con deterioro cognitivo implementada por ASCATE en Costa Rica.