Lima (Perú), 5 de febrero de 2016. Por iniciativa del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (Mimp), el Consejo de Ministros ha aprobado una propuesta de ley que busca reconocer los derechos específicos que asisten a las personas mayores de 60 años, que en su mayoría enfrentan el deterioro de sus facultades naturales, y así mejorar su calidad de vida.
El planteamiento recoge los nuevos consensos internacionales en los que existe preocupación por el respeto irrestricto de los derechos humanos de los mayores y la necesaria acción del Estado para garantizar su pleno ejercicio.
Con este instrumento el Perú estaría generando una estructura normativa que permitiría enfrentar el proceso natural de envejecimiento poblacional por el que atraviesa el país.
El incremento de la esperanza de vida explica que ahora cerca del 10% de los 30 millones de peruanos pertenezcan al segmento de los adultos mayores, y de ese grupo, la mayoría sean mujeres. Tal expansión queda confirmada por el Instituto Nacional de Estadística e Informática al revelar que existe una media de 40% de hogares peruanos que cuentan entre sus miembros a una persona mayor de 60 años.
Es bien sabido que el Estado ha puesto especial atención en este colectivo. De hecho, el Programa Nacional de Asistencia Solidaria, Pensión 65, ha recibido el Certificado ISO 9001:2008 por garantizar con el más alto estándar de calidad el sistema de gestión que desarrolla en el proceso de transferencia monetaria en beneficio de los adultos mayores de 65 años en condición de extrema pobreza, como un lineamiento importante de la política de inclusión social.
Sin embargo, existe el reto de mejorar aún más sus condiciones de vida con el establecimiento de líneas de acción, así como de promover y ampliar la cobertura de los programas y servicios dirigidos a este grupo poblacional.
Son aspectos recogidos precisamente por el proyecto de ley impulsado por el Mimp, como, por ejemplo, el derecho de los adultos mayores a vivir y envejecer en familia, y la plena integración al desarrollo social, económico, político y cultural de la Nación, para lo cual propone que los gobiernos nacional, regionales y locales implementen acciones en su favor, como la creación de los Centros Integrales de Atención al Adulto Mayor.
Así como el Gobierno se ha preocupado por los niños y adolescentes, esta vez son los adultos mayores los que son objeto de atención para envejecer dignamente en un país inclusivo.