Ciudad de México, 9 de diciembre de 2013. Los adultos mayores no deben ser discriminados, ya que tienen los mismos derechos que cualquier otra persona, además de su gran experiencia. Por ellos es necesario respetarlos y escuchar sus opiniones, porque son los pilares para que la sociedad viva en armonía, consideró Mayola Esthela López Guadarrama, ganadora de la Presea al Mérito en Prevención, Combate y Eliminación de la Discriminación en el Estado de México por su labor a favor de este colectivo. Resaltó, asimismo, que los adultos mayores son útiles a la sociedad, ya que aportan su experiencia, aunque hay quienes piensan lo contrario y se burlan de ellos por su forma de ser o de pensar. Sin embargo, pidió reflexionar por ser ésta una etapa de la vida a la que toda persona se dirige.
La defensora de los adultos mayores señaló que no se requiere un título o grado académico para realizar su labor a favor de este sector, pues lo que importa es el interés, o en su caso, su disposición para trabajar a favor de la humanidad, lo que le permitió atender en un principio a un grupo de 10 personas y ahora ya suman 250.
Desde su punto de vista, no hay actividad más satisfactoria que servir a los adultos mayores, ya que son un ejemplo de vida, por lo que propuso retomar los valores que tienen e incentivarlos a través de la convivencia, para hacerlos sentir parte de la familia y de la sociedad.
Sobre sus actividades para obtener el reconocimiento que otorga la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México- CODHEM y la Cámara Mexicana de la Construcción, Delegación del Estado de México, López Guadarrama detalló que se ha dado a la tarea de estar al pendiente de que lleguen a tiempo los apoyos federales, estatales y municipales para ese grupo y sobre todo, escucharlos y ayudarlos en algunas gestiones que deben realizar pero que por su edad se les dificulta.
Respecto a sus logros con la tarea que asumió de forma voluntaria, Mayola López Guadarrama expresó su satisfacción por sentirse útil y aconsejó a las familias, a no separarlos de ellas ni de la sociedad al enviarlos a asilos o lugares de retiro donde las personas de la tercera edad se sienten rechazadas, sino incluirlas y mantener integrado el núcleo familiar.
Fuente: Diario El Portal