Buen trato al adulto mayor, ¿de quién es la responsabilidad?

Santiago de Chile, 15 de octubre de 2015. Por Rodolfo Elgueta Bahamonde, Coordinador Regional del SENAMA. Estamos en medio del mes de los grandes, el que ha sido celebrado por muchas agrupaciones, clubes y talleres de adulto mayor; conmemorado por instituciones como el Servicio Nacional del Adulto Mayor-SENAMA en todas las regiones; las Municipalidades también reconocieron a sus mayores; algunos parlamentarios enviaron saludos; todo esto favorece mucho al reconocimiento de este segmento etario que tiene mucho que aportar a nuestra sociedad.

Al revisar nuestro comportamiento como sociedad mirando el año calendario muchas veces nos ufanamos en decir que somos campeones de la solidaridad cada vez que se acerca la Teletón, decimos “madre hay una sola” al recordar y abalanzarnos al comercio para comprar un obsequio a quien nos dio la vida, o nos esforzamos en mejorar nuestros pasos de cueca cada vez que se acerca el 18. ¿Pero que pasa el resto de los días? Para el caso de los adultos mayores, ¿Los reconocemos todos los días? ¿Observamos su aporte en el diario vivir? ¿Tratamos bien a nuestros mayores?

El Buen Trato al Adulto Mayor es una de las temáticas que trabaja el Servicio Nacional del Adulto Mayor con un programa que está orientado a generar  mejores condiciones para la inclusión social de los adultos mayores a través de actividades de difusión y talleres que buscan mejorar la visión que tiene la sociedad respecto al adulto mayor reconociendo en ellos un sujeto de derecho capaz de tomar sus propias decisiones considerando las distintas caras que tiene la vejez de acuerdo al territorio, el género, la descendencia , etc. Como se puede observar este programa no corta cintas ni tiene un presupuesto abultado como las acciones de infraestructura o apoyo social a los adultos mayores; sin embargo busca echar por tierra una de las barreras más compleja de derribar que impiden la plena inclusión, y esa es la barrera actitudinal.

Por lo tanto, podríamos decir que el Programa por el Buen Trato pasa a ser una política que no está orientada directamente a los adultos mayores sino que está orientado al resto de la comunidad para así cambiar una actitud más amable con aquellas personas que probablemente por la edad caminan más despacio pero no por eso es menos persona; una actitud preferente a la hora de situarse en una fila de atención ya que probablemente una persona mayor de 60 años no puede permanecer de pie periodos prolongados de tiempo; una actitud de respeto a la hora de referirse a personas mayores ya que no son los padres de nuestros padres por lo tanto no son nuestros “abuelitos”, ellos son abuelos de sus nietos si es que los tienen porque es un rol familiar no social; mirarlos a la cara y hablar con claridad porque probablemente tiene dificultades de escuchar, lo que no significa tratarlos como unos niños porque no lo son ya que probablemente por su experiencia y sabiduría: “cuando uno va, ellos ya vienen de vuelta y tres veces”; que los familiares no los abandonen a su suerte cuando se encuentran en dificultades físicas, mentales o emocionales; que los medios de comunicación no pongan en vitrina alguna condición de vulnerabilidad sin buscar soluciones.

El día 15 de Junio ha sido designado por la Asamblea de Naciones Unidas en su resolución 66/127, como aquella fecha en que mundialmente se conmemora la Toma de Conciencia sobre el Abuso y Maltrato en la Vejez. Por lo tanto, una fecha en que mundialmente se expresa rechazo contra todas las formas de maltrato y abuso de la que pudieran ser víctima las personas mayores.

El año 2014 El Servicio Nacional del Adulto Mayor modifica el tenor de la conmemoración generando una firma de un protocolo simbólico de todas las autoridades, en todas las regiones para el Buen Trato al Adulto Mayor, este año se incorporó a la empresa privada a nivel regional y se les realizaron charlas y talleres con presencia de dirigentes mayores para reforzar la búsqueda de conciencia por el Buen Trato; lo que ha generado cambios en la actitud y muchos organismos públicos han incorporado este aspecto como un enfoque de trabajo en distintas líneas donde se ve involucrado el adulto mayor.

Finalmente cabe preguntarse ¿Quién es responsable por generar condiciones por un Buen Trato a los Mayores? Como dice Neruda “todos caben en la tierra mía” por lo tanto también podemos decir que todos somos responsables y mucho podemos hacer o mejorar por sembrar “una sociedad para todas las edades”.

Fuente: El Divisadero

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